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Germán Leguía en su casa, 2013 |
Mi debut fue en el Deportivo Municipal en el año 1976, mi padre no quería que me dedicara al fútbol pese a que mi madre era hermana de Tito Drago, ella era la que me apoyaba, pero en esas épocas mandaba el papá no es como ahora que la mamá tiene decisión. Es más ahora la mujer decide muchas veces más que el hombre.
¿Cómo te motivabas para un partido de fútbol?
Me encantaba, la motivación estaba en la sangre porque yo quería jugar, yo desde pequeño quería jugar al futbol, de niño me hacía pelotas de medias, me encantaba. Esa era la motivación, ahora se usa el “sí se puede”, eso nunca lo usé.
¿Cuál era el ambiente del vestuario antes de un encuentro?
En Municipal era normal, en la selección si era música, bromas, era más emocionante, entrevistas por teléfono, la música salsa era espectacular, los veías bailar a todos eso te servía para disipar la mente, que no estés ansioso para un partido porque puedes salir muy desesperado. Eso no es lo más recomendable.
¿Cuál era tu entrenamiento personal fuera del club?
Me cuidaba bastante, moría por el fútbol, me tomaba mis tragos pero sabía cuando tomarlos, lo que yo hacía después de un partido era: llegar a mi casa, comer un poco, abrir una botella de vino, conversar con mi esposa y a dormir.
¿Te era importante el aliento del público?
Claro que sí, yo dije alguna vez dije: el día que juegue sin público me retiro, yo no podría jugar con mil personas o mil quinientas personas. Ahora los estadios no se llenan porque ya no hay espectáculo antes el Municipal tenia a Chumpitaz, Sotil, Malasquez; el Boys a Muñante, Ramírez; Alianza Lima con Cubillas, Cueto, La Rosa, en la actualidad no hay buen nivel.
¿Qué papel cumplía tu familia en tu profesión?
Importante, casarse con una buena mujer es importantísimo, tener unos hijos muy educados, tener una buena familia es una tranquilidad inmensa para seguir trabajando, no hay peor problema que estar mal en tu casa.
¿Cuándo conformaste la selección peruana tenían una preparación psicológica especial ahora que se habla mucho de este tema?
No, eso es mentira, eso del psicólogo en el fútbol es mentira. Te voy a contar una anécdota, una vez a un jugador, no te voy a decir el nombre, el psicólogo le dijo: no te preocupes que vamos a jugar en el Maracaná, tranquilo, no pasa nada, tienes que tener fuerza. Y el jugador le respondió: ¿usted ha estado ahí alguna vez?, el psicólogo le dijo no, entonces vete a la m… respondió el jugador.
¿Eso quiere decir que eres muy escéptico en cuanto a la preparación psicológica?
Si claro, no la creo. Ahora que hay psicólogos en la selección ¿acaso hemos clasificado a algún mundial? Uno lo que tiene que hacer es confiar en el entrenador, el entrenador es tu padre, el que te da confianza, el que te da fe, como Markarian que protege al jugador. Que le habla, el más claro ejemplo es Markarián, que ha logrado potenciar a jugadores que no estaban en las expectativas de nadie, como Cruzado, Ramírez, Advincula, Yotún, Luis Garcia.
¿Cuál es el partido que más recuerdas Germán?
El partido contra Francia en el Parque de los Príncipes es difícil de olvidar, enfrentar a Platini es un recuerdo enorme. Otro de los partidos que más recuerdo es contra Italia en el mundial de España 1982, nos jugamos un partidazo. Italia terminó pidiendo tiempo.
¿Qué sentimientos le produjo enfrentar a Italia que luego sería campeona del mundo?
Espectacular, una adrenalina inmensa, a mí me encantaba jugar contra equipos buenos, no equipos que se meten atrás.
¿Cómo reaccionabas frente a una derrota?
No dormía, y si había concentración peor, me quedaba pensando en el partido toda la madrugada hasta las 6 a.m. que recién me quedaba dormido. Me resultaba horrible la semana y tenía que esperar hasta el próximo partido para ganar.
¿Cuáles son tus mejores amigos en el fútbol?
Los mejores amigos siempre he dicho que son Guillermo La Rosa, Oblitas, Cesar Cueto en resumen personas muy correctas, disciplinadas. Unos caballeros igual que yo.
¿Cuál fue el gol que más festejaste?
Uno que anote con la selección peruana frente a la Fiorentina en una gira, anotar con la selección es una experiencia increíble.
¿Cuál es el peor momento que te ha tocado pasar?
Perder a mi hermano y a mi madre, la muerte de un familiar es lo peor que te puede pasar en la vida, es durísimo. Me afectó mucho en algunos partidos.
¿Extrañas el fútbol?
Así como está ahora no, me da cólera, fui dirigente de Universitario y renegué más de lo que goce. Tuve grandes amigos pero no grandes dirigentes, gastaban más de lo que tenían.
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